50 años de historia
Tostando desde 1973

La historia de Torrefazione Pe-Fè comenzó en 1973, cuando Ferrero Peciarolo, animado por una voluntad incansable y una fuerte pasión creativa, decidió hacer realidad su sueño. En un pequeño lugar del centro histórico de Orte, nacieron las primeras mezclas de café, fruto de la determinación de crear un producto excelente, imbuido de la conciencia de que sólo un laboratorio artesanal podía proporcionar la frescura y la fragancia tan deseadas.

El año 1979 marcó un hito importante en el crecimiento de la tostaduría, cuando se abrió un nuevo punto de venta. Este importante paso fue posible gracias a la valiosa colaboración de la esposa de Ferrero, Laura Piersanti, y posteriormente gracias al compromiso incansable de sus hijos, Federico y Federica.

La familia se convirtió así en el corazón de la empresa, ayudando a difundir la pasión por las mezclas de café de alta calidad entre clientes cada vez más fieles.

Cincuenta años de experiencia han dado forma al Pe-Fè Torrefazione, transformándolo en un punto de referencia indiscutible para los amantes del café. En este largo recorrido, el conocimiento profundo de todas las facetas relacionadas con el mundo del café ha sido una constante, manteniendo intacta la filosofía de empresa centrada en la calidad y el arte artesanal.

Hoy, más que ayer, la empresa Pe-Fè sigue siendo una historia de pasión familiar que se fusiona armoniosamente con el arte de tostar, ofreciendo a los clientes la oportunidad de saborear el auténtico sabor de un café preparado con amor y dedicación.

Federico y Federica, animados por la misma pasión que inspiraba a su padre, se unieron con entusiasmo a Torrefazione Pe-Fè.

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Su determinación se ha expresado en el compromiso constante de perfeccionar las distintas mezclas y en las diferentes fases del ciclo de producción. Con mucho mimo, han prestado mucha atención a las novedades del mercado y a las innovaciones tecnológicas, respetando siempre la calidad y frescura que sólo una empresa artesanal puede garantizar.

Trabajando junto a su padre, contribuyeron a forjar el destino de la empresa, transmitiendo a través de sus habilidades un vínculo cada vez más sólido con la tradición familiar. Su presencia activa ha permitido a Pe-Fè Torrefazione mantenerse a la vanguardia, adaptándose con agilidad a las necesidades cambiantes del mercado sin comprometer nunca la filosofía de producir un café excelente.

En una unión de tradición y modernidad, Federico y Federica han sabido mantener vivo el patrimonio artesanal, siempre dispuestos a integrar los conocimientos del pasado con los desafíos del presente. Su visión de futuro ha permitido a la empresa crecer sin perder de vista la importancia de ofrecer a los clientes la quintaesencia de la calidad, subrayando el valor intrínseco de un café producido con mimo y dedicación.